Problema a solucionar: «Mi hijo tiene dificultades para controlar sus impulsos, como gritar o actuar sin pensar.»
Desarrollo: El autocontrol es una habilidad esencial para el éxito social y emocional. Enseñar a los niños a gestionar sus impulsos y controlar sus reacciones ante situaciones difíciles es clave para su desarrollo.
Ejemplo de problema: Tu hijo tiende a reaccionar impulsivamente cuando algo no sale como esperaba, gritando o tirando cosas en momentos de frustración.
Solución:
Con estas herramientas, tu hijo aprenderá a gestionar sus impulsos de manera más efectiva, lo que le ayudará a tener relaciones más armoniosas y a tomar decisiones más reflexivas. 🧠🚦